Los estilos de vida ejercen un efecto importante como determinantes del estado de salud y causa de las principales enfermedades crónicas.
Las intervenciones de promoción de estilos de vida saludables se dirigen, por una parte, a mejorar el entorno y la sociedad en que se vive y, por otra, a mejorar las capacidades de las personas para llevar una vida más sana.
Toda la ciudadanía debe adquirir un protagonismo sobre su propia salud (Salud 21, OMS, 1999). Potenciar la autonomía y el empoderamiento de las personas favorece su implicación a nivel individual en la toma de decisiones sobre su salud y como ciudadano en la política sanitaria en general incrementándose los buenos resultados.
Documentación del Plan
- Informe de Evaluación en el ecuador del Plan
- Informe divulgativo en el ecuador del Plan
- El ictus. Qué es, como reconocerlo y qué hacer (cast / eusk)