Quercus pyrenaica | |
Descripción: árbol de hasta 25 m, caducifolio. Hojas simples, profundamente lobuladas, con lóbulos estrechos, y muy pelosas por el envés, que tiene aspecto afieltrado. Las hojas son marcescentes, es decir, permanecen en las ramas en invierno una vez secas. Flores femeninas poco aparentes, las masculinas en amentos colgantes. El fruto es una bellota con el pedúnculo corto. Ecología: suelos generalmente ácidos, con frecuencia arenosos; pisos supramediterráneo, colino y montano, con ombroclima al menos subhúmedo. Distribución: valles cantábricos desde Arano a Valcarlos; en la vertiente mediterránea desde Larraun a Lantz, Cabredo y Marañon y algún punto de la Burunda; a pesar del nombre latino del marojo las Sierras de Leire, Illón y Orba (esta última en Aragón) son las únicas localidades pirenaicas. Nomenclatura: Quercus pyrenaica Willd. |