En otoño, nuestros bosques cambian de color, tiñéndose de diversos colores. Pero, ¿a qué se debe éste cambio de color en las hojas?

Las hojas realizan la fotosíntesis con ayuda de la clorofila. Estos pigmentos absorben la energía de la luz y reflejan el color verde. Durante el otoño, las plantas cesan su actividad paulatinamente, reduciendo su contenido en clorofila.

Es en este momento cuando otros pigmentos fotosintéticos toman el protagonismo, de modo que reflejan diferentes colores en base al pigmento predominante: amarillo y naranja (carotenoides) o rojo (antocianinas). 

Durante el otoño, las plantas se preparan para el invierno, almacenando reservas y absorbiendo los últimos nutrientes y compuestos aprovechables de las hojas, antes de que estas caigan definitivamente.