12 de agosto de 2020

Navarra realizará a principios de septiembre un cribado preventivo de COVID-19 a 6.000 usuarios de residencias de mayores y de discapacidad

Salud y Derechos Sociales pretenden blindar el espacio sociosanitario para prevenir contagios en personas vulnerables al coronavirus, que ayer registró 142 nuevos positivos
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El Departamento de Salud, en colaboración con el de Derechos Sociales y la red de centros de residencias de mayores y personas con discapacidad, realizará en la primera quincena de septiembre un programa de cribado preventivo con pruebas de detección e inmunidad a cerca de 6.000 residentes de unos 150 centros de toda Navarra con el objetivo de blindar el espacio sociosanitario y prevenir el impacto del COVID-19 en los colectivos más vulnerables, un virus que ayer produjo en la Comunidad Foral un total de 142 nuevos casos y cinco hospitalizaciones.

El Departamento de Salud, en colaboración con el de Derechos Sociales y la red de centros de residencias de mayores y personas con discapacidad, realizará en la primera quincena de septiembre un programa de cribado preventivo con pruebas de detección e inmunidad a cerca de 6.000 residentes de unos 150 centros de toda Navarra con el objetivo de blindar el espacio sociosanitario y prevenir el impacto del COVID-19 en los colectivos más vulnerables, un virus que ayer produjo en la Comunidad Foral un total de 142 nuevos casos y cinco hospitalizaciones.

La medida del cribado forma parte de un conjunto de actuaciones, en torno al personal sociosanitario y residentes, abordadas en una reunión entre los departamentos de Salud y de Derechos Sociales.

Navarra, por otra parte, también va a reforzar el equipo de rastreo de contactos y mantener, así, el sistema de detección completado por la alta capacidad de realización de PCR que le ha colocado, junto a la Comunidad Autónoma Vasca, a la cabeza de pruebas por mil habitantes. En concreto, ayer se realizaron más de 1.800. 

La orden foral de prevención de contagios en temporeros y otras normativas con actuaciones especiales en zonas de alta incidencia, en colaboración con las autoridades locales, completan el abanico de medidas con las que se aborda el repunte del COVID-19 de este verano y la preparación de la contingencia del otoño, en la que influirán nuevos factores como el arranque del curso escolar o la llegada de la gripe, aspectos que ya se están trabajando de forma interdepartamental e interautonómica.

El sistema sanitario en su vertiente asistencial mantiene su capacidad de respuesta para asumir el incremento de ingresos que ya se está percibiendo, por lo que Salud reitera el llamamiento a mantener las medidas de prevención y reducir al máximo los espacios de riesgo y contactos sociales evitables.  Ayer había ingresadas en Navarra 50 personas, no se dieron fallecimientos y una persona salió de la UCI, donde quedan 7.   Con una perspectiva semanal, aproximadamente el 3% de los casos se traducen en ingresos.

Los datos del día: la segunda jornada con más PCR, 1.833 pruebas

Navarra registró ayer 142 nuevos casos positivos de infección por COVID-19 y cinco ingresos hospitalarios, según los datos provisionales facilitados por el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), tras realizar 1.833 pruebas PCR. Esta cifra solo fue superada el 25 de julio, con 1.948 pruebas PCR. En lo que va de pandemia, se han hecho 122.340. No se registraron nuevos fallecimientos.

Geográficamente, Pamplona y su comarca concentra un 65% de los nuevos casos, seguido del Área de Salud de Tudela, con un 14% de los casos, y el Área de Salud de Estella, con un 6%. El 15% restante se reparte por otras zonas de Navarra.

En cuanto a la distribución de los casos por franjas de edad, el grupo de 15 a 44 años es el mayoritario, alcanzando el 43% del total de los casos, seguido del grupo de 0 a 14 años, con un 27%. A continuación, siguen el grupo de 45 a 59 años, con el 16 % de los nuevos casos y el de 60 años en adelante, con un 14%. En cuanto al género, el 56% de los nuevos casos son mujeres y un 44%, hombres. La edad media de los nuevos casos es de 32,6 años. Esta media de edad se viene manteniendo en las últimas semanas. En ella influye que el grupo de menos de 15 años también ha cogido mayor peso específico en los últimos días –en torno al 19% según los datos de Salud Pública- debido, sobre todo, al tipo de brote más extendido que es el familiar, con contagios intrafamiliares e intergeneracionales.

Desde el punto de vista epidemiológico, ayer se constataron en Navarra cinco nuevas hospitalizaciones por COVID-19 como causa principal de ingreso. No se notificó ningún nuevo fallecimiento, por lo que la cifra acumulada de muertes confirmadas por este coronavirus, desde el inicio de la pandemia, es de 531.

En la red hospitalaria de Navarra permanecen ingresadas 50 personas con COVID-19, siete de las cuales se encuentran en puestos UCI (una menos que el día anterior) y otras seis en hospitalización domiciliaria. Los demás, 37 pacientes, están en planta. Todas estas personas dieron positivo en una prueba PCR, sea esta infección o no el motivo de su ingreso hospitalario.

En cuanto al sistema de detección precoz y seguimiento de casos y contactos estrechos, ayer se realizaron un total de 1.833 pruebas PCR en la red sanitaria pública, que dieron lugar a los 142 nuevos casos confirmados provisionalmente. Si se suman al total los casos de ayer, la incidencia acumulada de infecciones por COVID-19, a día de hoy, se sitúa en 7.754.

Perspectiva semanal: tendencia al alza y unos 50 brotes activos

La visión a vista de semana epidemiológica, recogida en el último boletín de vigilancia, corrobora una tendencia general al alza en todos los parámetros. La última semana estudiada (3-9 de agosto) registró 654 casos, cifra superior a la anterior (con 415 casos) e incluso más alta que la del 20 al 27 de julio, en la que hubo 617 casos. Muchos de ellos fueron derivados de los contactos sociales encuadrados en el contexto de las suspendidas fiestas de San Fermín que, entre otros focos, se saldó con el brote de Mendillorri, con más de 240 casos. En parte, la situación se ha repetido ahora en el Área de Tudela, que ha tenido una incidencia semanal de 147 casos por 100.000 habitantes, frente a los 85 del Área de Pamplona y los 29 de la de Estella.

No obstante, hay en torno a 50 brotes repartidos por diferentes zonas de la geografía navarra. Dos tercios de estos brotes son de menos de 10 personas y, en la misma proporción, el tipo de brote más típico es el relacionado con el entorno familiar y social. La mayoría son de volumen reducido, aunque en algunos casos, sobre todo cuando hay ramificaciones laborales como es el caso de trabajadores agrícolas en Murillo el Fruto y Carcastillo tiene más casos (31). No obstante, este brote está en fase de contención y seguimiento.

En este ámbito laboral agrario, como es sabido, Salud, junto a otros departamentos como el de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, han puesto en marcha un plan de cribados preventivos entre la población de temporeros que hoy se ha recogido también en la correspondiente normativa trasladada a los agentes del sector y a todos los alcaldes de Navarra junto con más información relativa al COVID- 19.

Necesidad de reducir los contactos y encuentros sociales de riesgo

Además de estas actuaciones sectoriales y de intervenciones adaptadas a cada población, en el caso de precisar medidas colectivas que van más allá del protocolo de rastreo de contactos, el Departamento de Salud considera que “aumentar el rastreo y la detección precoz; reducir los contactos sociales de riesgo; blindar el espacio sociosanitario y tener preparado el sistema sanitario en clave de contigencia” son cuatro ejes claves para afrontar esta nueva fase de la pandemia, según ha precisado la consejera Santos Induráin. Todo ello con una coordinación transversal institucional y trabajo compartido.

Además del citado cribado en residencias, que va a desarrollar la Unidad Sociosanitaria entre el 1 y el 15 de septiembre, también se va a reforzar el equipo de rastreo hasta alcanzar los 54 profesionales estables, además de otros 100 formados que se sumarán, según las necesidades. En este equipo figurarán también profesionales de trabajo social y mediación intercultural, entre otros, manteniendo siempre el núcleo de personal sanitario, especialmente de Enfermería. El objetivo es seguir garantizando la identificación de todos los contactos estrechos de un positivo en 24 horas y la realización de la correspondiente PCR al día siguiente en los nuevos escenarios que puedan surgir.

Por otra parte, Salud sigue trabajando con otros departamentos (Educación; Políticas Migratorias y Justicia; Cohesión Territorial; Universidad, Innovación y Transformación Digital; Desarrollo Rural, Derechos Sociales; Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior; Cultura y Deporte, Relaciones Ciudadanas...) para profundizar en la eficacia de la prevención de contagios y seguimientos de brotes así como en los correspondientes protocolos ante situaciones de calado en cada sector y calendario de actividades.