¿Cuánto tiempo dedicas al autocuidado personal? Se trata del conjunto de acciones, o 'hábitos de vida', que emprende una persona en beneficio de su salud y bienestar. 

Estos son los diferentes tipos de autocuidado:

• Autocuidado físico: cuando atendemos las necesidades de nuestro cuerpo y de nuestra salud. Por ejemplo, es la alimentación saludable, prestar atención a los períodos de descanso, realizar ejercicio físico, mantenerse activo/a...
• Autocuidado intelectual: hace referencia al ejercicio de nuestra mente, a la estimulación de nuestro pensamiento crítico y creatividad. Estos son algunos ejemplos: leer libros que nos enriquezcan, practicar actividades creativas (dibujar, escribir, cocinar, bailar…), dedicar tiempo a formaciones que nos resulten interesantes...
• Autocuidado social: mantener relación con otras personas resulta fundamental para lograr un estado de bienestar personal. Por ejemplo, quedar con amigas y amigos, juntarse con la familia, realizar actividades grupales que nos interesen o tratar de conocer gente que nos aporte cosas positivas.

Cuando hablamos acerca de las cosas que se nos dan bien, de las actividades que nos resultan más gratificantes y fáciles de hacer, de qué actividades nos interesan y apasionan más, de qué tareas nos suponen una mayor dificultad y tratamos de evitar… estamos hablando de autoconocimiento para el empleo.

Te proponemos una serie de ejercicios: 

• Analiza tus debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades. 
• Reflexiona sobre lo que te gusta, lo que te apasiona, lo que se te da bien. 
• Pide a personas de tu entorno que te describan con tres adjetivos.
   

¿Cómo te gustaría que fuera tu futuro trabajo? ¿Qué cosas priorizas a la hora de aceptar (o no) un trabajo? Estamos hablando de tus intereses profesionales. 

Si cuando vamos al cine echamos un vistazo a la cartelera para elegir una película, o cuando pensamos en ir de vacaciones nos informamos acerca del posible destino... ¿por qué no hacer algo parecido cuando nos planteamos cuál nos gustaría que fuese nuestro futuro trabajo?

Más aún, teniendo en cuenta que en el trabajo vamos a pasar gran parte de nuestro tiempo diario.

Estas son algunas cuestiones a tener en cuenta: 

• Intereses profesionales. Explorar tus gustos, intereses y preferencias es importante para que puedas decidir en qué área o ámbito quieres empezar a buscar empleo:
  • ¿Te gusta trabajar con objetos o máquinas? ¿Te consideras una persona práctica y persistente? 
  • ¿Te gusta analizar datos, investigar, resolver problemas complejos? 
  • ¿Te gusta estar con gente? ¿Se te da bien la relación con las personas? 
  • ¿Prefieres actividades estructuradas, organizadas y basadas en normas? 
  • ¿Te llama la expresión personal, el diseño y la creatividad? 
  • ¿Eres una persona a la que le gusta gestionar proyectos o equipos, liderar y/o persuadir? 
    
    Si no tienes claro cuáles son tus intereses profesionales y quieres que te ayudemos, recuerda que puedes solicitar una cita en Orientación Profesional. 
     
  Pedir cita
• Condiciones de una oferta de trabajo. A la hora de decidirnos por un empleo u otro, no todo es el trabajo en sí, sino las condiciones que lo rodean. Reflexiona sobre qué aspectos priorizas a la hora de buscar trabajo y aceptar (o no) una oferta: 
  • Sueldo. Siendo realista y concretando (obviamente toda la gente queremos “cuanto más, mejor”), ¿por debajo de qué sueldo no aceptarías un empleo?
  • Cercanía al domicilio. ¿En qué ámbito te planteas la búsqueda de empleo? ¿Tu pueblo o ciudad? ¿A cuántos kilómetros de tu domicilio? ¿Otras comunidades autónomas? ¿Trabajo en Europa?
  • Jornada. ¿Estás buscando una jornada completa o parcial? 
  • Horario. ¿Tienes limitaciones o preferencias horarias de trabajo? ¿Tienes disposición para el trabajo a turnos, nocturno, jornadas partidas…? ¿Necesitas flexibilidad horaria?
  • Identifica otros aspectos que para ti son importantes. ¿Alguna otra cuestión a tener en cuenta? ¿Algo importante que incluso te haría rechazar una oferta de trabajo?
     

¿Qué habilidades, aptitudes y conocimientos tienes? Son tus competencias personales y profesionales.

En la actualidad, el sector laboral está dominado por la tecnología y las relaciones virtuales. Por ello, cada vez más empresas demandan profesionales con unas competencias personales que puedan aplicar de forma trasversal a su puesto de trabajo. Son las llamadas 'soft skills'. 

Estas competencias aportan éxito y un importante valor añadido a la organización, y las compañías lo saben. Además, potencian tu perfil personal y laboral, independientemente del sector al que pertenezca la empresa o de la profesión a la que te dediques. 

Estas son solo algunas de las competencias personales y profesionales que se valoran en el puesto de trabajo:

• Trabajo en equipo
• Visión estratégica
• Liderazgo
• Adaptación al cambio
• Proactividad
• Empatía
• Capacidad de comunicación

Si quieres conocer en qué competencias eres fuerte y aquellas en las que necesitas mejorar, recuerda que puedes solicitar cita en Orientación Profesional y te ayudaremos a desarrollarlas.