El Ejecutivo foral, a través del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, y la Mancomunidad de Andia han colaborado en la puesta en marcha del primer Espacio test agro-ganadero de Navarra. Se trata del proyecto piloto “Zunbeltz” financiado por la medida 16.2 del Plan de Desarrollo Rural (PDR) del Gobierno de Navarra, impulsado y coordinado por la Mancomunidad Andia y en la que participan la UPNA y CPAEN / NNPEK como entidades socias, para crear el primer espacio test con orientación agro-ganadera con el objetivo de impulsar el relevo generacional en la zona.

Para la realización de este proyecto europeo, el Gobierno de Navarra ha cedido a la Mancomunidad de Andia las fincas Zunbeltz y La Planilla, pertenecientes al Patrimonio Forestal de la Comunidad Foral, con una autorización de uso para 10 años.

En concreto, el objetivo del espacio test agrario es crear un entorno seguro para la experimentación de proyectos agrarios de personas emprendedoras, de cara a su futura instalación, mediante un proceso de acompañamiento y formación personalizado, que garantice el relevo generacional, de acuerdo a principios de colaboración, economía circular y a la conservación de los recursos y valores naturales.

La presentación del proyecto ha tenido lugar esta mañana en la finca de Zunbeltz, situada en el Parque Natural de Urbasa-Andia, con la participación de la consejera de Desarrollo  Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez; el presidente de la Mancomunidad Andia y alcalde del Valle de Yerri, Edorta Lezaun; la presidenta de CPAEN / NNPEK, Mirian Otxotorena; el representante de la UPNA, Iñigo Virto; el concejal de Lezaun, Javier Osés; la técnica de la Mancomunidad Andia, Elena Cereceda; y el director del CI Agroforestal, Miguel Ángel Jordán. Además, han asistido representantes de INTIA y de la Asociación TEDER. 

La consejera Gómez ha destacado que “proyectos como éste representan una excelente oportunidad para hacer frente al despoblamiento en el medio rural, un compromiso firme de la Dirección General de Desarrollo Rural que impulsa y apoya de forma decidida iniciativas encaminadas a fijar población en el territorio”. También ha añadido que “tan importante como la realización de estas experiencias, es la transferencia de los resultados de las mismas que pudieran ser aplicables al resto del sector primario y en otras comarcas de Navarra”.

Por su parte, Edorta Lezaun ha señalado que “con este proyecto mostramos el compromiso de los cinco pequeños municipios que formamos la Mancomunidad Andia. Estamos colaborando para impulsar políticas activas e innovadoras de apoyo a nuevas generaciones agrarias en el territorio, aprovechando las oportunidades que nos brinda el PDR para impulsar nuevas prácticas que favorecen la dinamización del sector y la economía local, y contribuyen a fijar población”.

El presupuesto del proyecto asciende a 190.779 euros. El Gobierno de Navarra financia el 90% (el 65% procedente de los fondos FEADER, “Europa invierte en zonas rurales”) y el 10% restante lo aportan los socios participantes (Mancomunidad de Andia, 8%; CPAEN / NNPEK, 1% y UPNA, 1%).

Fincas de Zunbeltz y La Planilla

Las fincas forestales Zunbeltz y La Planilla están ubicadas en el entorno del Parque Natural y ZEC Sierras de Urbasa-Andia. Zunbeltz tiene un total 231 hectáreas, de las que algo más de 30 hectáreas son pascícolas. En esta finca se construirá un aprisco multifuncional de 200 m2. Por otra parte, la finca de la Planilla tiene 197 hectáreas y unas 3,9 son pastos. Además, la Mancomunidad de Andia está buscando otras fincas por la zona.  En ambas fincas se plantea la realización de experiencias en ganadería, fundamentalmente ecológica en extensivo, donde se podrán testar y desarrollar los proyectos innovadores que fomenten el relevo generacional.

La Mancomunidad de Andia, compuesta por los ayuntamientos de Abárzuza / Abartzutza, Guesálaz / Gesalatz, Lezáun, Salinas de Oro y el Valle de Yerri / Deiserri, además de la asumir la coordinación del proyecto, es la entidad responsable de la edificación y adquisición de las infraestructuras. CPAEN / NNPEK se encargará de realizar un estudio analizando las oportunidades y las experiencias productivas y de comercialización de éxito que se presentará a las personas emprendedoras. Por último, la UPNA realizará los planes de mejora silvopastoral y liderará el plan de acompañamiento formativo integral de las personas téster, entre otros.

Los espacios test agrarios son una nueva práctica, complementaria a las ya existentes y previos a la solicitud de ayudas a la primera instalación, de apoyo a personas emprendedoras en su profesionalización en el sector agrario. Se basan en cuatro pilares: el soporte físico es el espacio en que se desarrolla la actividad agrícola; el soporte legal define el marco de actuación en la que la persona téster tiene cubiertas sus responsabilidades laborales y fiscales; bajo el soporte integral se ofrece una formación especializada y un proceso de acompañamiento a las personas emprendedoras. Toda la coordinación y articulación del espacio test se realiza a través de la gobernanza, asegurando la dinamización y comunicación entre todas las personas y entidades participantes.

Relevo generacional

La falta de relevo generacional en la actividad agraria es uno de los principales retos a superar para promover el sostenimiento de la producción agroalimentaria y de la población rural. Tanto en el ámbito de Navarra como en el de Tierra Estella, el sector agrario está cada vez más envejecido. En el conjunto de Navarra, según los datos del censo ganadero, 240 explotaciones desaparecieron en el período de 2008 a 2018. En Tierra Estella existen actualmente 853.

En esta línea, el proyecto quiere dar una respuesta a esta problemática y ofrecer políticas de apoyo a nuevas generaciones. La metodología que se implementará estará basada en el enfoque ‘Campesino a campesino’, en la que personas ganaderas en activo asesorarán directamente la actividad agro-ganadera ecológica.

En el Estado español los espacios test agrarios son incipientes y actualmente hay ocho en desarrollo: seis en Cataluña, uno en Extremadura y otro en el País Vasco, asociados a la Red de Espacios Test Agrarios, RETA. En Francia, por el contrario, están muy desarrollados, y a día de hoy cuenta con más de 50 espacios test agrarios activos agrupados en la red RENETA.