Las fundaciones son entidades de economía social que destinan un patrimonio y unos recursos a un fin social.

Se trata de entidades que actúan por el interés general de la sociedad de la que surgen y a la que pertenecen.

Además, complementan la labor de las instituciones públicas en un amplio abanico de sectores de la sociedad. 

Entre esos posibles fines, se encuentran los siguientes:

• Defensa de los Derechos Humanos
• Defensa de los principios democráticos y cívicos
• Educativos, científicos, de investigación...
• Sanitarios, deportivos y promoción de la vida saludable
• Fomento y difusión de la cultura
• Defensa del medio ambiente y la sostenibilidad
• Cooperación al desarrollo
• Igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres...

Estos son tres pasos básicos que hay que tener en cuenta:

• Una fundación puede ser creada por personas físicas y personas jurídicas, tanto públicas como privadas.
   
• Para ello tiene que contar con unas escrituras públicas de constitución, en las que se recogen los datos de las personas fundadoras (si son personas físicas) y su denominación o razón social (si son personas jurídicas). 
   
• Las fundaciones también deben contar con unos estatutos e inscribirse dentro del Registro de Fundaciones de Navarra.