La valoración de la dependencia

No debe confundirse la condición de persona con discapacidad y la condición de persona con dependencia. Muchas personas discapacitadas no son dependientes, pues no requieren de la atención de otra u otras personas para realizar las actividades básicas de la vida diaria. 
Sólo si el grado de discapacidad alcanzado es del 75% o más, se activa el reconocimiento del grado de dependencia. ¡Infórmate!

    

¿Qué es dependencia?

Por dependencia se entiende la situación permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, precisan de la atención de otra u otras personas o de ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria o, en el caso de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental, de otros apoyos para su autonomía personal.

Tipos de dependencia

Según sean las necesidades que tenga la persona para realizar sus tareas cotidianas, la situación de dependencia se clasifica en los siguientes grados:

  • Grado I. Dependencia moderada: cuando necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria al menos una vez al día, o tiene necesidades de ayuda intermitente o limitada (por ejemplo, para sacar dinero del cajero automático). 
  • Grado II. Dependencia severa: cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, dos o tres veces al día, (como vestirse correctamente) pero no requiere el apoyo permanente de un cuidador.
  • Grado III. Gran dependencia: cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, varias veces al día y, por su pérdida total de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, necesita el apoyo indispensable y continuo de otra persona.

Cómo y dónde solicitar la valoración

Para proceder al reconocimiento de la situación de dependencia se puede solicitar cita en la Unidad de Barrio o el Servicio Social de Base correspondiente, donde le ayudarán a  cumplimentar la solicitud de valoración para su familiar dependiente. También puede hacerlo por internet a través de este trámite,  donde encontrará información sobre cómo se realiza  y qué documentos debe presentar. 

Personal de la Sección de Valoración se trasladará al lugar de residencia de la persona en situación de dependencia para realizar la valoración.

Discapacidad y dependencia

Si el grado de discapacidad alcanzado es de 75% o más, se activa el reconocimiento del grado de dependencia para determinar la necesidad de una tercera persona para realizar los actos más esenciales de la vida y reconocer a la persona dependiente el derecho a un complemento de pensión en su modalidad no contributiva. 

En este mismo trámite se le reconocerá también la existencia de dificultades de movilidad para utilizar transportes colectivos. 

El certificado de valoración de dependencia, ¿me puede servir para acreditar mi discapacidad o viceversa?

El certificado de valoración de grado y nivel de dependencia no sirve para acreditar el grado de discapacidad, por lo que cada valoración debe solicitarse expresamente. 
Ambas valoraciones se efectúan con distintos baremos y generan también derechos diferentes.
 

Por dependencia se entiende la situación permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, precisan de la atención de otra u otras personas o de ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria o, en el caso de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental, de otros apoyos para su autonomía personal.

Según sean las necesidades que tenga la persona para realizar sus tareas cotidianas, la situación de dependencia se clasifica en los siguientes grados:

  • Grado I. Dependencia moderada: cuando necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria al menos una vez al día, o tiene necesidades de ayuda intermitente o limitada (por ejemplo, para sacar dinero del cajero automático). 
  • Grado II. Dependencia severa: cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, dos o tres veces al día, (como vestirse correctamente) pero no requiere el apoyo permanente de un cuidador.
  • Grado III. Gran dependencia: cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, varias veces al día y, por su pérdida total de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, necesita el apoyo indispensable y continuo de otra persona.

Para proceder al reconocimiento de la situación de dependencia se puede solicitar cita en la Unidad de Barrio o el Servicio Social de Base correspondiente, donde le ayudarán a  cumplimentar la solicitud de valoración para su familiar dependiente. También puede hacerlo por internet a través de este trámite,  donde encontrará información sobre cómo se realiza  y qué documentos debe presentar. 

Personal de la Sección de Valoración se trasladará al lugar de residencia de la persona en situación de dependencia para realizar la valoración.

Si el grado de discapacidad alcanzado es de 75% o más, se activa el reconocimiento del grado de dependencia para determinar la necesidad de una tercera persona para realizar los actos más esenciales de la vida y reconocer a la persona dependiente el derecho a un complemento de pensión en su modalidad no contributiva. 

En este mismo trámite se le reconocerá también la existencia de dificultades de movilidad para utilizar transportes colectivos. 

El certificado de valoración de grado y nivel de dependencia no sirve para acreditar el grado de discapacidad, por lo que cada valoración debe solicitarse expresamente. 
Ambas valoraciones se efectúan con distintos baremos y generan también derechos diferentes.