19 de septiembre de 2022

Salud realizó el año pasado más de 8 millones de atenciones, recuperando gran parte de su actividad pese al impacto de la pandemia

La Memoria de 2021, presentada ante el Consejo Navarro de Salud, constata el esfuerzo del sistema público por compatibilizar la actividad ordinaria con la gestión de cinco olas COVID-19 y el proceso masivo de vacunación con más de un millón de dosis
Carlos Artundo, Santos Induráin y Gregorio Achútegui, durante la reunión 
del Consejo.
Carlos Artundo, Santos Induráin y Gregorio Achútegui, durante la reunión del Consejo.  Descargar imagen Ver galería de imágenes

El Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea (SNS-O) realizó el año pasado más de 8 millones de atenciones, recuperando así gran parte de su actividad habitual pese seguir presente el impacto de la pandemia. Esto se concluye de los principales datos recogidos en la Memoria de 2021, que ha sido presentada esta tarde ante el Consejo Navarro de Salud.

De hecho, el importante esfuerzo económico y organizativo por parte de la red de Atención Primaria y Hospitalaria, además del Instituto de Salud Pública y Laboral y los centros de Salud Mental, ha posibilitado hacer compatible la gestión del COVID-29 -que causó cincos olas entre enero y diciembre, además de exigir un proceso de vacunación masiva nunca conocido con más de un millón de dosis administradas en ese tiempo- con la recuperación de gran parte de la actividad ordinaria del sistema sanitario público navarro, cuyos principales indicadores habían sufrido una importante caída en el año previo, 2020, ejercicio ampliamente superado por los datos del 2021, que se acercan ya a los prepandémicos.

De hecho, sin llegar en todos los casos a niveles de 2019 o de años previos, los principales números constatan esta tendencia de recuperación clara e incluso en algunos casos incrementos. Así, pese a que en 2021 el impacto de la pandemia fue todavía muy importante, los centros de Salud superaron los 6 millones de consultas en diferentes estamentos con una recuperación progresiva también de la presencialidad.

Los hospitales también remontaron en cuanto a número de ingresos (51.740, con sus correspondientes estancias), mientras que se incrementaron el total de primeras consultas y revisiones hasta sumar 836.793, así como el de las distintas pruebas complementarias más relevantes (208.864) y operaciones quirúrgicas (46.981). Los hospitales de día médicos (crónicos, tratamientos oncológicos, hemodiálisis, etc.) realizaron 116.789 atenciones a casi 20.000 pacientes diferentes. En cuanto a la red de Salud Mental, sus centros realizaron 151.854 atenciones, a las que hay que añadir 23.886 estancias en hospitales de día, entre otras.

A esto hay que agregar otros dos datos de Urgencias: las 227.221 atenciones de Urgencias hospitalarias y las 420.187 extrahospitalarias, es decir, en conjunto 647.408.  

Esta estadística da una idea del volumen de actividad y trabajo del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea en sus tres hospitales, 57 centros de salud, 237 consultorios, once centros de salud sexual y reproductiva y otros tantos de Salud Mental, cuya red también ha vivido esta doble realidad COVID-19 y no COVID-19 por el impacto emocional y mental de la pandemia.

Otro dato significativo de la dimensión del reto que significó el pasado ejercicio para el SNS-O y sus profesionales es el continuo incremento del volumen de personas con derecho a la atención sanitaria pública, que han pasado de 637.683 en 2018, a 653.395 en el cierre de 2021, según esta memoria, además del impacto del progresivo envejecimiento de la población. En 2022 han seguido creciendo, entre otras cuestiones, por el impacto de la crisis humanitaria de la guerra de Ucrania traducida en un millar de personas acogidas con sus nuevas TIS, además del efecto cualitativo del progresivo envejecimiento de la población.

Según se explica en la memoria, “el año 2021, al igual que el año 2020, también fue muy complicado para todas las organizaciones sanitarias. Las distintas olas del COVID-19 continuaron afectando a toda la actividad asistencial, tanto de Atención Primaria, como de Atención Especializada”, señala. La diferencia sustancial en este campo radicó en “la disponibilidad de vacunas y el afán por distribuirlas lo antes posible, que ha exigido un gran esfuerzo organizativo que ha permitido llegar a unos porcentajes de vacunación de la población difícilmente mejorables”, se indica.

“Al mismo tiempo –añade el texto- se ha hecho un gran esfuerzo por recuperar programas de salud y actividades que se habían interrumpido por la pandemia. Gracias a este triple esfuerzo del SNS-O y de todos sus profesionales vamos superando los retos que continúan surgiendo día a día y que exigen una adaptación continua de toda la organización”, se explica en el texto elaborado por el SNS-, cuyo director gerente, Gregorio Achútegui, ha sido el encargado de exponerlo y de realizar una comparativa de la evolución de los distintos indicadores respecto a 2020.

Un ejercicio todavía muy marcado por el COVID-19 en un doble sentido

El año pasado, como gran parte del actual, el factor COVID-19 siguió siendo muy condicionante, tanto en atenciones, como en la prevención y vacunación. Eso sin olvidar las bajas entre el personal sanitario, afectado también como la población general. Los datos del COVID-19 en Navarra en 2021 reflejan 44.561 casos confirmados con 594 fallecidos. Los pacientes hospitalizados fueron 2.507, de los cuales 347 estuvieron en algún momento en la UCI. La vacunación temprana a las personas de las residencias, a profesionales sanitarios y sociosanitarios de las residencias de personas mayores y de atención a grandes dependientes, al personal que trabaja en el ámbito sanitario y sociosanitario y a las personas consideradas como grandes dependientes, y la posterior vacunación por edades comenzando por las personas de mayor edad y descendiendo según grupos etarios, contuvo la trasmisión en las dos primeras olas. La tercera ola, con mayor transmisión en gente joven, hizo adelantar la vacunación a las personas jóvenes. La cuarta ola, con la mayoría de jóvenes vacunados, afectó más a niños y niñas con un comportamiento similar a la tercera. La quinta ola, con la variante Ómicron, llegó sin haber finalizado la cuarta y en el momento de vacunación de mayores de 5 años. Esta última ola destaca por una mayor transmisividad, pero con un porcentaje mucho menor de afectación hospitalaria.

Implicación de todo el departamento, el Gobierno y de Salud Pública y Laboral

Tanto la consejera Santos Induráin como el director general Carlos Artundo han puesto en valor la implicación de todo el Departamento de Salud, incluyendo del Instituto de Salud Pública y Laboral (cuya memoria también ha sido presentada por Marian Nuin, su directora gerente) en relación con la pandemia (epidemiologia y enfermedades transmisibles) pero también en otras ramas de su actividad ordinaria (promoción de la salud, salud ambiental, seguridad alimentaria, cribados preventivos de distintos cánceres, etc.), así como la colaboración interdepartamental, interinstitucional y también con entidades locales, sociedades científicas, representantes del mundo sindical y laboral, y de la sociedad civil. Esta filosofía de atender la pandemia, pero protegiendo al máximo su impacto sobre la actividad ordinaria y las líneas estratégicas, ha sido una prioridad desde el primer momento que las circunstancias han llevado a ir modulando; y una apuesta para el presente ejercicio de 2022, sobre el que no hay datos estadísticos cerrados, así como de cara al próximo año 2023 que se está planificando, como también se ha expuesto en la sesión.

Estudio de seroprevalencia, Plan de Atención Primaria y vacunación en otoño

 En la misma sesión ha sido presentada a agentes sanitarios y sociales un repaso a la actual situación epidemiológica y sanitaria; a las líneas claves de la nueva campaña de vacunación de otoño, así como el nivel de desarrollo del Plan de Atención Primaria, sin olvidar los datos del reciente y referencial estudio de seroprevalencia, además de otros temas.

El Consejo Navarro de Salud es un órgano consultivo de representación y participación del que forman parte, entre otros, la consejera de Salud, el director general, la secretaria técnica, el director gerente del SNS–O, la Dirección de Asistencia sanitaria al paciente, la directora gerente de Atención Primaria y la del Instituto de Salud Pública y Laboral, así como las  directoras gerentes de las Áreas de Salud de Estella-Lizarra y del Área de Salud de Tudela por parte del SNS-O y del departamento.

Asimismo, estaban convocados la Confederación Empresarial de Navarra (CEN), la Federación de Municipios y Concejos y representantes de los colegios oficiales de profesionales médicos, de Farmacia, de Fisioterapia, de Terapia Ocupacional, de Enfermería, de dentistas, de dietistas-nutricionistas, de Podología, de veterinarios, de Trabajo Social, de Psicología, entre otros. También han participado representantes sindicales, así como la Asociación de Consumidores y Usuarios, Irache, entre otros actores sanitarios y sociales.