Las obras de desdoblamiento de la NA-700 entre Orkoien y Arazuri ya han finalizado con una inversión de 2.244.566,85 euros. El consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza; el alcalde de la Cendea de Olza, Moisés Garjón; y la presidenta del concejo de Arazuri, Alicia García, han comprobado el resultado de los trabajos que han permitido aumentar la seguridad de esta vía, separando la circulación de los tráficos en cada sentido, y mejorará el enlace con la Ronda Oeste (A-15).

A la visita han acudido también el director del Servicio de Nuevas Infraestructuras, Jesús Polo y el gerente de Construcciones Osés, Alberto Latienda, entre otros asistentes.

La seguridad de la vía se ve aumentada, en primer lugar, gracias al desdoblamiento de los 700 metros de la carretera NA-700 que discurren entre la glorieta cerrada situada al final de la variante de Orkoien y el enlace de la Ronda Oeste. La antigua calzada de dos direcciones ha sido sustituida por una vía desdoblada con direcciones de tráfico separadas por una barrera física, donde no existe la posibilidad de choque frontal entre vehículos. La doble calzada presenta una anchura de 7 metros con arcenes exteriores de 2,50 metros e interiores de 1 metro, en los que se ha instalado la mencionada barrera de hormigón doble.

En segundo lugar, se han sustituido las anteriores intersecciones en “T” de la Ronda Oeste con la carretera NA‑700 por dos glorietas cerradas ubicadas en esta última que permiten realizar todos los movimientos. De esta manera se ha eliminado el riesgo de choque frontal y se ha disminuido la gravedad de los accidentes que se puedan producir, debido a la baja velocidad necesaria para circular por ellas.

Ambas glorietas cuentan además con una anchura de calzada de 9,50 metros y arcenes de 2,5 metros. Por su parte, la isleta central dispone de una acera de 3 metros que permite resguardar la zona interior ajardinada.

Además, con el fin de reforzar la seguridad en la zona de las rotondas, se ha instalado alumbrado en las dos nuevas glorietas, al objeto de mejorar la visibilidad y la percepción de que se llega a una nueva intersección y que se debe, por lo tanto, reducir la velocidad.