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La Policía Foral detiene a dos personas por provocar incidentes en el pleno del Ayuntamiento de Olazagutía
sábado, 31 de enero de 2004Agentes de la Policía Foral detuvieron a dos vecinos de Olazagutía como presuntos autores de los delitos de desórdenes públicos, desobediencia, resistencia y atentado contra agentes de la autoridad, tras los incidentes que se produjeron con ocasión del pleno ordinario del Ayuntamiento que se celebraba a las 20.00 horas de ayer, viernes, 30 de enero.
Los detenidos, J.M.L.S. y J.L.M.G., de 44 y 35 años respectivamente, fueron trasladados a dependencias policiales en Pamplona, donde finalizadas las diligencias propias del atestado, fueron puestos en libertad y deberán comparecer el próximo martes ante un juzgado de instrucción de la capital.
Los hechos que motivaron la intervención de agentes de la Unidad Móvil de Intervención (UMI) de la Policía Foral se iniciaron cuando, a la hora de dar comienzo el pleno, una manifestación no autorizada de unas 70 personas, tras una pancarta que rezaba “C.I.O. – PSOE faxistak”, comenzó a proferir insultos y a atacar con material pirotécnico –cohetes, bengalas, botes de humo- a los agentes que participaban en el despliegue de seguridad exterior del Consistorio.
Los agentes repelieron las agresiones utilizando material antidisturbio para habilitar la calle Mayor al tránsito libre de personas y vehículos, e incautaron,
asimismo, parte del material utilizado por los manifestantes como artefactos fumígenos, petardos y bengalas, que pondrán a disposición judicial.
Precisamente, uno de los cohetes pirotécnicos lanzados por los manifestantes alcanzó en un brazo a un mando operativo de la Policía Foral, que tuvo que ser atendido de sus heridas en un centro de urgencias de Pamplona.
Los incidentes en el exterior se prolongaron por espacio de hora y media, repeliendo los agentes el constante lanzamiento de piedras, botellas y cohetes por parte de diferentes grupúsculos concentrados en las inmediaciones del Ayuntamiento, al que intentaban acceder por la fuerza.
Mientras tanto, en el interior del Consistorio, una concejala del PSOE pidió auxilio desde un balcón tras ser agredida, lo que motivo la entrada de agentes de la Policía Foral en apoyo de los escoltas encargados de la seguridad de los concejales, que habían forcejeado con un grupo de simpatizantes de la extinta Batasuna que increpaban e intentaban agredir a sus protegidos. En ese momento se procedió a la detención de las personas señaladas.
Finalizado el Plano, la alcaldesa y los concejales de la Coalición C.I.O.-PSOE solicitaron el apoyo y la escolta de la Policía Foral para regresar a sus domicilios, apoyo que se realizó ante las amenazas y gritos proferidos a lo largo del recorrido hasta sus casas, por parte de personas del entorno abertzale.
La Policía Foral sospecha que los incidentes estaban perfectamente organizados, ya que se cometieron simultáneamente tanto en el interior como en el exterior del Ayuntamiento. Se conocía, además, el llamamiento hecho en localidades próximas por el entorno de Batasuna para acudir a la referida manifestación, por lo que se había reforzado el dispositivo de seguridad con la movilización de una veintena de agentes de Intervención de la Policía Foral.
